viernes, 28 de noviembre de 2008

Adolescencia: inicio de la maduración sexual


La pubertad, en primer lugar, se refiere a la obtención de la madurez sexual y la capacidad de procrear, por lo que exige una gran adaptación a los cambios internos y externos. Las glándulas endocrinas son aquellas que permiten mantener el balance del cerebro mediante el hipotálamo, el cual da inicio al crecimiento y la capacidad reproductora; y la hipófisis, que segrega hormonas del crecimiento y hormonas tróficas secundarias, además de estimular y regular el funcionamiento de otras glándulas, entre ellas, las sexuales. En los varones, estas glándulas sexuales, secretan mayor cantidad de andrógenos, – testosterona – lo que producen los espermatozoides, además del crecimiento del pene, ensanchamiento de hombros y aparición de vello en la zona genital y la cara. Las mujeres secretan estrógenos, lo que permite la ovulación, el crecimiento del útero, senos y caderas; también producen progesterona.

La maduración sexual de los varones se inicia con el rápido crecimiento de los testículos y el escroto, el pene también crece aceleradamente, pero aproximadamente un año después, el vello púbico comienza a aparecer y la primera secreción puede ocurrir entre los 11 y 16 años. Mientras que en las mujeres el inicio de la maduración sexual se da con el crecimiento de los senos, el desarrollo del útero y de la vagina (agrandamiento de los labios vaginales y del clítoris), pero el signo más evidente del paso de niña a adolescente es la menarquia, que tiene lugar entre los 9 años aproximadamente hasta los 16. Por lo general, la menstruación aparece cuando la mujer ha alcanzado su estatura adulta y ha almacenado un poco de grasa corporal, por otro lado, puede producir “cólicos”, tensión, irritabilidad, depresión, llanto, inflamación e hipersensibilidad de los senos.

La maduración puede presentarse precoz o tardía. En los niños, una maduración a destiempo puede ocasionar que se vean, sienta y sean tratados como más pequeños, se cree que se encuentran en desventaja para los deportes y situaciones sociales. El niño que madura precozmente obtiene ventajas sociales y atléticas, y puede ser líder del grupo. En las niñas la maduración tardía permite que se de a la par con los niños, lo que ayuda a su integración (mismos intereses y privilegios). Y las niñas que maduran de forma precoz son más altas y desarrolladas, pero tienen menos oportunidad de compartir sus cambios físicos y psicológicos con sus compañeros, sin embargo, son más populares entre los adolescentes mayores.

3 comentarios:

Charly de viaje dijo...

Es muy importante tener una idea de los procesos y su oportunidad. La idea de "normalidad" preocupa sumamente, donde al mismo tiempo identifiquen sus características entre lo particulares y las comunes. Y cómo lo peculiarmente particular también es normal. Por ejemplo, es posible llevar una vida plena y con oportunidades en todos los aspectos si su talla es inferior. En este sentido el artículo hace aportes interesantes para que los maestros se preocupen por el impacto emocional que estos cambios conllevan. Yo añadiría que al mismo tiempo no se debe perder de vista nunca a la persona. Evitar encasillar al individuo como el sujeto adolecente.

Unknown dijo...

La socialización del adolescente con su grupo de pares me parece fundamental. Felízmente, suele suceder, que en un salón de clases puedan conformarse grupos entre similares. Pero eso no es suficiente porque hay muchos casos que no encajan directamente con la generalidad. Hay muchos casos que obliga o debiera obligar a los maestros a propiciar una toma de conciencia para fomentar la inclusión de todos, incluso los aparentemente algo diferentes. Educar en la aceptación de cada uno en su forma especial de ser, es fomentar la responsabilidad y la libertad para una realización plena de la persona, respetándose a sí misma y respetando a los demás.

Anónimo dijo...

La burla entre los jóvenes a raíz de los cambios que experimentan en su cuerpo, es infaltable. Más ahora que todos estan expuestos debido al momento social en que vivimos. La moda, los cuerpos tonificados y "perfectos", los medios masivos han convertido a la gente es seguidora de un ideal que no son ellos. Si no te gusta algo, por último, te lo operas, y si no has hecho algo que todos tus amigos si, no eres nadie. Creo que en este caso lo más importante es acompañar a los adolescentes en su crecimiento físico y psicológico, sobre todo por los propeblas que podría ocasionar tanta confusión y bombardeo en su autoestima, seguridad y confianza.